miércoles, 19 de diciembre de 2018

Kril Antártico - Euphausia superba

Kril Antártico - Euphausia superba

El Kril Antártico - Euphausia superba, es una especie de crustáceo malacostráceo del orden Euphaucea propia de las aguas frías de los océanos Atlántico y Pacífico en las inmediaciones de la Antártida.

Es un crustáceo de pequeño tamaño de hasta 6 cm de longitud y 2 g de peso, que puede vivir hasta seis años y forma enormes cardúmenes de gran densidad que llegan hasta 30 mil ejemplares por m3.

Se alimenta de fitoplancton, aprovechando la energía que éste toma de la luz solar; por lo que constituye un eslabón esencial en la cadena trófica del ecosistema antártico,​ y es a la vez alimento de varios animales, entre ellos peces, pingüinos, petreles y ballenas.

Todos los miembros del orden Euphausiacea son crustáceos del superorden Eucarida, en los que la placa pectoral está unida al “caparazón” y forma a cada lado de éste las agallas del kril, visibles al ojo humano. 

Las patas no forman una estructura mandibular, lo que diferencia a este orden de los decápodos (langostinos, cangrejos). 

Las concentraciones principales están en el mar del Scotia en la península Antártica. 

El kril antártico abunda en las aguas superficiales de los mares del sur: tiene una distribución circumpolar, con las mayores concentraciones en el sector del océano Atlántico. 

El límite de los sectores del mar austral, que incluyen al Atlántico, al Pacífico y al Índico se definen en forma aproximada por la convergencia antártica, un frente circumpolar donde el agua fría superficial se sumerge bajo las aguas subantárticas más cálidas. Este frente corre aproximadamente a 55º Sur y desde allí al continente. 

El océano austral cubre 32 millones de km2.

En invierno más de tres cuartas partes de la superficie están cubiertas por hielo, en tanto que en verano unos 24 millones de km² se encuentran libres de él. 

La temperatura del agua se encuentra en un rango entre -1,3 y 3 °C. 

Las aguas del océano Austral forman un sistema de corrientes, incluyendo la corriente circumpolar antártica, que produce la circulación en sentido oeste-este de las aguas superficiales, y la corriente costera antártica, que corre en sentido antihorario. En el frente entre ambas, se desarrollan grandes remolinos, como ocurre en el mar de Weddell. El kril se distribuye siguiendo estas masas hídricas, estableciendo una presencia homogénea alrededor de la Antártida, con intercambio genético en toda el área. 

Es poco conocido el patrón de migración exacto, debido a que el kril no puede ser monitoreado individualmente para estudiar sus movimientos. 

El kril es la especie clave del ecosistema antártico, y constituye una importante fuente de alimento para las ballenas, pinnípedos, focas leopardo, focas peleteras, focas cangrejeras, calamares, peces hielo, pingüinos, albatros y muchas otras especies de aves. 

La foca cangrejera (Lobodon carcinophagus) ha desarrollado dientes especiales como adaptación para capturar al kril, lo que le permite obtenerlos del agua. La dentadura funciona como un colador perfecto, aunque se desconoce la estrategia exacta utilizada por el predador. La cangrejera es la foca más abundante del mundo, y el 98% de su dieta está constituida por kril antártico. 

Según estudios realizados​ estas focas consumen más de 63 millones de toneladas anuales de kril. 

La foca leopardo ha desarrollado dientes parecidos, y en su dieta el kril implica el 45% de su dieta. 

El consumo anual de la cadena trófica representa valores entre 152 y 313 millones de t de kril, de los cuales las focas consumen entre 63 y 130 millones, las ballenas entre 34 y 43 millones, las aves entre 15 y 20 millones, los calamares entre 20 y 100 millones, y los peces entre 10 y 20 millones.

Para tener una idea de lo que estas cantidades significan, téngase en cuenta que el total de captura pesquera mundial​ durante el año 2002 fue de 84,5 millones de toneladas.

Los huevos se depositan cerca de la superficie y comienzan a hundirse. En mar abierto se hunden durante alrededor de 10 días y las larvas eclosionan a unos 3000 m de profundidad. 

La temporada principal de reproducción del kril antártico abarca desde enero hasta marzo, tanto en la placa continental como en las áreas de mar profundo. 

El macho adhiere un paquete de esperma en la abertura genital de la hembra. Con este propósito la primera pata del macho tiene una estructura específica de herramienta de apareamiento. 

La hembra pone entre 6.000 y 10.000 huevos en cada puesta, que son fertilizados a medida que salen por el canal genital, por el esperma liberado desde el espermatóforo adherido por el macho.

Desde el momento en que los huevos eclosionan, la primera larva (primera nauplus) comienza a migrar hacia la superficie con ayuda de sus tres pares de patas, en lo que se denomina "ascenso del desarrollo". En los dos estados larvales siguientes, segundo nauplius y metanauplius​ el animal todavía no se alimenta, nutriéndose del remanente de la yema. Transcurridas tres semanas, el pequeño kril ha completado su ascenso. Pueden aparecer en cantidades enormes, dos ejemplares por litro en una profundidad de hasta 60 metros. Al crecer, se suceden otros estados larvarios: primero y segundo calytopis, primero a sexto furcilia. En estos estados larvarios se produce el desarrollo completo de las patas, los ojos compuestos y las cerdas. Con un tamaño de 15 mm los juveniles ya poseen los hábitos de los ejemplares adultos. La madurez se alcanza a una edad de entre dos y tres años. 

Como todos los crustáceos, el kril debe mudar para poder crecer. Cada trece a veinte días, aproximadamente, pierde su exoesqueleto quitinoso y lo deja atrás como exuvia. 

El intestino de E. superba puede verse frecuentemente de un color verde brillante a través de la piel transparente del animal, lo que indica que su alimento predominante es el fitoplancton.

El kril antártico tiene la habilidad de capturar las minúsculas células del fitoplancton de una forma que ninguna otra especie puede lograr. Lo hace utilizando sus muy especializadas patas frontales, que constituyen un eficiente aparato de filtrado y las seis patas unidas al tórax como canasta de recolección. 

En bajas concentraciones de alimento, la canasta de alimentación empuja a través del agua y luego las algas se introducen en la boca mediante cerdas especiales situadas en el lado interior de las patas. 

El kril ha desarrollado filas especiales de rastrillos de cerda en el extremo de las patas, con las que raspa el hielo en un patrón zigzagueante en forma parecida a una cortadora de césped. Pueden limpiar las algas a una velocidad de aproximadamente 1,5 cm²/s. Se sabe desde hace relativamente poco que la película de algas bajo el hielo oceánico está muy desarrollada en grandes superficies, y a menudo contiene mucha más materia orgánica que toda la columna de agua por debajo. 

El kril es altamente desordenado para alimentarse, y a menudo regurgita materia orgánica de fitoplancton en forma de bolas que contienen miles de células agrupadas. También produce hilos fecales que todavía contienen cantidades significativas de carbono y cristales de los caparazones de diatomea. Ambos materiales son pesados, y caen relativamente rápido al fondo del mar. Este proceso se denomina bomba biológica. 

Como el océano alrededor de la Antártida es muy profundo (2000 a 2400 m) el resultado es el hundimiento de grandes cantidades de dióxido de carbono (CO2), con lo que se elimina carbono de la biosfera y la fijación resultante se mantiene por unos 1000 años. 

Suele llamárselo "camarón luminoso" porque puede emitir luz, producida por órganos bioluminiscentes, que se encuentran ubicados en varias partes del cuerpo: pares de órganos detrás de los ojos, y en la articulación de la segunda y séptima pata, y órganos simples en los cuatro esternones. Emiten periódicamente luz de color amarillo verdoso claro, cada dos o tres segundos. Como muestra de su alto nivel de evolución, incluyen un reflector cóncavo atrás del órgano propiamente dicho, y un lente en su frente para aumentar la luz producida. El órgano completo puede rotarse gracias a músculos específicos. La función de esta luz no es todavía comprendida cabalmente: algunas hipótesis sugieren que sirven para enmascarar la sombra del kril, de manera que no pueda ser avistado por sus predadores desde abajo. Otras especulaciones sostienen que juega un rol significativo en el apareamiento nocturno. 

Aunque la utilidad y los motivos para la evolución de su impresionante ojo compuesto permanecen en el misterio, no existen dudas que el kril antártico posee una de las estructuras para percepción visual más fantásticas de la naturaleza. 

Puede disminuir su tamaño de una muda a otra (cuando lo "normal" entre las especies de muda es siempre aumentarlo), en lo que parece ser una estrategia para adaptarse a la escasez estacional de alimento, ya que un cuerpo menor requiere menos energía, y -en consecuencia- menos alimento. La reducción no alcanza sin embargo a los ojos compuestos. La relación entre el tamaño del ojo y la longitud corporal ha demostrado servir, por lo tanto, como un indicador relativo de inanición.

Existen sospechas fundadas de que la biomasa del kril antártico ha disminuido rápidamente en el transcurso de las últimas décadas. Algunos científicos han especulado que tal disminución podría haber alcanzado hasta el 80%. La causa sería la reducción de la placa de hielo debido al calentamiento global.

La pesca del kril antártico está en el orden de 100 000 toneladas anuales. Las principales naciones son Japón y Polonia. El producto es muy usado en Japón como alimento de lujo y en todo el mundo para alimento balanceado y cebo de pesca. La captura se dificulta por dos razones principales. En primer lugar, una red para kril debe tener un tejido muy fino, lo que genera un arrastre muy alto y olas de proa que desvían al kril hacia los lados. En segundo lugar, las redes finas tienden a romperse o atascarse más fácilmente. Un problema adicional es traer el kril capturado a bordo: cuando la red llena es izada del agua, los animales se comprimen de tal forma que pierden mucho de su líquido orgánico. 

El procesamiento del kril debe ser muy rápido teniendo en cuenta que luego de la captura se deterioran en pocas horas. El objetivo del procesamiento es separar las patas de la sección frontal, y retirar el caparazón quitinoso, con el fin de producir productos congelados y polvos concentrados. 

El alto contenido de proteínas y vitaminas lo hace apropiado para el consumo humano y la industria de alimentos balanceados.

Perú es miembro titular del Tratado Antártico y como tal realiza investigaciones en torno al kril en su base Machu Picchu de la Antártida y haciendo uso del B.I.C Carrasco, el buque oceanográfico más moderno y mejor dotado de América Latina, con el que realiza anualmente expediciones científicas con participación de varias naciones.

También es de suma importancia para Perú la Antártida porque en ella se origina la Corriente de Humboldt de aguas frías, la que llega hasta sus costas y determina el especial clima en su territorio. y su riqueza marina.

Kril Antártico - Euphausia superba

Kril Antártico - Euphausia superba 

B.I.C Carrasco

Base Machu Picchu

No hay comentarios:

ALGO IMPORTANTE EN ESTE WEBSITEr